El ataque aéreo ocurrió el 9 de marzo en la ciudad de Mariúpol, en el sureste de Ucrania.
Al menos tres personas murieron.
Tras el ataque, circuló la imagen de la mujer herida mientras un grupo de hombres la trasladaban desde el hospital, donde debía dar a luz, hacia otra clínica.
La mujer fue atendida por el cirujano Timur Marin.
Marin indicó que la pelvis de la mujer quedó aplastada y que la cadera se desprendió, según declaraciones que recoge la agencia de noticias Associated Press.
El bebé nació por cesárea, pero sin señales de vida, dijo Marin.
Los médicos dijeron que, mientras intentaban salvarle la vida, la mujer se dio cuenta de que estaba perdiendo a su bebé y gritó: “¡Mátenme ya!”.
Cuando vieron que el niño había nacido muerto, los médicos intentaron revivir a la madre, pero después de 30 minutos no tuvieron resultado.
Los médicos dijeron que no tuvieron tiempo de tomar el nombre de la mujer antes de que su esposo y su padre vinieran a recuperar su cuerpo. Eso significa que su cuerpo no terminó en una de las fosas comunes que se están cavando para las víctimas del bombardeo ruso a Mariúpol, señalaron los doctores.
Fuente: https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-60737837